El trabajo detrás de un blog de éxito: no apto para impacientes

Con la imagen de un gato esperando ante un agujero en la pared, al más puro estilo Tom y Jerry, el periodista Manolo Rodríguez ejemplifica una de las claves fundamentales para tener un blog: la paciencia. “Al principio nadie os va a leer”, afirma con rotundidad ante un público que ya ha manifestado su intención de abrir un blog. ¿Desalentador? No, todo lo contrario. El autor de Desenredando la Red comparte su experiencia, lo bueno y lo malo, para mostrar un camino que no por arduo debe rehuirse. Lo hace en el centro de coworking WekCo ante casi una treintena de personas que han acudido al reclamo del título de su charla, ‘Claves para tener un gran blog‘. La mayoría aspiran a tener un blog, pero aún no se han lanzado, así que las claves de Manolo pueden convertirse en ese decálogo de cabecera al que recurrir cuando llegue la tentación del abandono. Al fin y al cabo, Desenredando la Red no alcanzó las 5.000 visitas hasta pasados los cuatro meses de escribir puntualmente. Ahora cada semana supera esta cifra. Como ejemplo a seguir no está nada mal.

Pero empecemos por el principio. “Para todo el que quiera desarrollar su marca personal, el blog es una herramienta fundamental”, asegura. Porque es un espacio propio donde creamos contenido bajo nuestras reglas, contraponiéndolo con las redes sociales como espacio de alquiler en el que la gestión de nuestro contenido corre a cargo de alguien más. Ya sabemos por qué apostar por un blog. ¿A qué esperamos para montarlo? A ser capaces de responder a las preguntas adecuadas. Manolo Rodríguez habla de un proceso de preparación de meses que nos permita madurar y trabajar la idea que nos lleve a crear un blog. “No llega con abrir un blog y empezar a escribir, eso dura unos meses y después se cierra”, señala. Para reducir el riesgo de abandono, es fundamental el trabajo previo de definir de forma realista y concreta los objetivos que nos marcamos con nuestro blog, así como el perfil tipo del público al que queremos llegar. Qué queremos conseguir con nuestros artículos y quién queremos que nos lea. Estas dos preguntas deben responderse antes de ponerse a escribir una sola línea.

Pasión, pasión, pasión

Manolo Rodríguez también aconseja centrar el blog en un único tema y cuanto más específico sea, mejor. “Vais a tener menos público al que llegar, pero vais a llegar mejor”, subraya. “Tenéis que buscar un tema que os apasione”, añade, porque montar y mantener un blog “es un esfuerzo tremendo”, así que mejor escribamos de algo que de verdad nos guste para evitar el desaliento. Y hay que intentar “ser diferentes”. “Para mí esto es la parte más complicada, porque depende mucho del talento”, confiesa Manolo.

Tenemos un tema que nos apasiona, tenemos unos objetivos claros marcados, tenemos un público objetivo definido. Llega el momento de lanzar el blog y de retomar la paciencia del gato ante el agujero. Con 200 millones de blogs en el mundo, tendremos suerte si nos lee alguien más que la familia y los amigos. Y es que “un blog es un recorrido a medio-largo plazo”, señala Manolo. Y así hay que tomárselo, con paciencia, pero también con constancia, dando lo mejor de nosotros de manera constante, sin desistir, tratando a las 30 visitas diarias como si fuesen 3.000. Porque ante la duda de si es mejor la calidad o la cantidad, el autor de Desenredando la Red lo tiene claro: es mejor escribir pocos artículos, pero buenos, que muchos y malos o regulares.

Llegados a este punto de la charla, tenemos claro que tener un blog es un trabajo, no un hobby, que hay que tomarse muy en serio si se aspira a perdurar con cierto éxito. Pero también parece evidente que está al alcance de cualquiera con fuerza de voluntad para hacer el trabajo previo y ser paciente y constante. Y aquí llegamos a las habilidades que, según Manolo Rodríguez, debe tener un bloguero: que le guste escribir, que le guste comunicar y que le guste enseñar. Y aclara: esto no significa que sepa escribir ni que sepa comunicar ni que sepa enseñar. Pero si no le gusta nada de esto, no tiene sentido que empiece este recorrido.

Quizás alguien se pregunte a qué viene lo de enseñar cuando estamos hablando de un blog, por ejemplo, sobre series de televisión. Nos apasionan las series de televisión, así que escribimos artículos sobre ellas, pero también leemos un montón para mantenernos al día sobre ellas y vamos descubriendo, averiguando y aprendiendo sobre ellas y es este conocimiento el que volcamos en nuestro propio blog, convirtiéndonos en divulgadores de información. Estamos enseñando a nuestros lectores. Y si hacemos bien este proceso, acabaremos por convertirnos en un referente a la hora de que el público se informe sobre series de televisión. Manolo Rodríguez describe este proceso así: “Lo que es nuestra pasión lo convertimos en contenido y ese contenido lo convertimos en servicios”.

Y no lo dice por decir. Los que se han perdido la charla, sólo tienen que acudir a Desenredando la Red para leer las ‘10 características clave para que funcione nuestro blog‘, artículo en el que comparte lo que ha aprendido para guiar a nuevos blogueros. Lo dicho: divulgar, compartir, enseñar. Manolo Rodríguez practica con el ejemplo. Por eso, esta charla tendrá una segunda parte en la que hablará de ‘Cómo escribir artículos efectivos en tu blog‘. Para seguir convirtiendo su pasión en servicio.

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Como el aprendizaje no está reñido con la diversión, nos despedimos con un divertido vídeo que bien podría simbolizar los efectos no deseados de la impaciencia.